Rodillo blandito y de gran tamaño, que al rodar por el suelo, estimula el gateo y el movimiento autónomo, gracias a sus colores contrastados y al tintineo de su cascabel interior. A partir de los 6 meses, nuestros bebés pueden comenzar a explorar el mundo a través del gateo y podemos ayudarlos, estimulando el desarrollo de sus habilidades motoras con este rodillo para el gateo de Miniland. Este material no puede faltar en las salas de estimulación temprana, ya que permite sostener el cuerpo del bebé desarrollando el sistema vestibular, el equilibrio y el control del movimiento.